lunes, 10 de mayo de 2010

Por alguna razón

Por alguna razón
el meandro está cubierto de mamparas
y es posible la alegría al calendario.

Por alguna razón
el candelabro que me quema la cabeza
ha puesto ratoneras contra la química
serotonínica del descalabro.


Y, en cierto modo,
lo prefiero a sonreír.


Por alguna razón
la tristeza salta tres iglesias
mientras mayo se empeña
en que todavía haya flores
que quemar.


Por alguna razón
soy un asesino en serie:
aritmético homicidio de ti.


Por alguna razón
salivo alevosía.


Y, en cierto modo
es hermoso
rumiar el metacarpo.


Por alguna razón
razonamos la nostalgia,
racionamos los racimos
y amenazamos los rizos
del rinoceronte.


Por alguna razón
metástasis de ti
me invade el cuerpo.


Por alguna razón
muero
por alguna razón.

1 comentario:

campanilla dijo...

Me ha gustado, pero sobretodo, ése final.. es la ostia.