miércoles, 21 de octubre de 2009

Erizo

No estoy hoy para chapuzas.
El aroma es un altar donde subyacen los ferrocarriles
y en cada puerta que abro
crepitan las cigarras.

Muchas veces la clarividencia me conmueve
y no tengo nada para el tarot.
Si regurgito los establos
lloverá con más pereza.

Rezo al muro de las ocasiones
dándole porrazos al legón
y me vienen a buscar
las sinalefas.

Un hombre que ladra
es un hombre
y un perro que grita
es un coral.

Sí.

Lo sé desde que te he visto
en el sexo
el sacapuntas.

Lo sé desde que te he visto
en el flexo
los leotardos.

Grítale al perro tu nombre
y te dirá perro,
grítale tus dientes a un hombre
y se hará mayor.

A mí mastícame,
soy perro y dardo,
soy cerro y daño.
Soy aluvión.

Abrázame.

Erizo.

No hay comentarios: